lunes, 5 de diciembre de 2011

Réquiem de trincheras

Trenes que al roncar abrieron paso en sombras,
mientras silenciaron sus adioses en el humo,
hondeando pañuelos de temblor ennegrecidos
con consuelos hilados de anillos y palabras.

Abrir. Primavera, verano, otoño, invierno.
Vivo mirar al rojo como el cañon que dispara,
mirando el uno por vivir y el otro mirando
de deshilar los cielos de cada mirada. Cerrar.

Mochilas volviendo sin traer sus pisadas.
Resurreciones desde las trincheras, en llantos
de mujeres sosteniendo camisa de sangre y polvo.
Campanadas de huesos rotos y almas arrebatadas.

Tiendas de roto celeste de viejas campañas
sostenidas por columnas de purpureo aullido,
que acaban en capiteles de ojos que se cerraron
para arder de puestas y noche sus pestañas.



F.J.G.G.

5 comentarios:

  1. La nostalgia llega con las manos vacías y regresa con alforjas que dan forma al sentimiento. He estado leyendo algunas entradas y disfrutando de tu ingente creatividad y transparencia. Cada vez que atraviesas el fuego otro matiz del alma forjas. Un fuerte abrazo.

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  2. Con menor o mayor fortuna, uno siempre intenta abrirse camino entre todo aquello que considera tesoro, para impregnarse y seguir en busca de otros en un ciclo que, gracias a personas como tú, nunca acaba. Gracias, gracias de corazón Eli, amiga.

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  3. afortunados los que vuelven aún así, para alegría o consuelo de sus familias
    cuántos hay que quedan envueltos en mortajas anónimas , en páramos extranjeros

    excelente poema social
    felicitaciones

    besitos y luz

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  4. Los pasillos de tu alma, tan bien escrita nos devuelven a las nuestras vestidas de niñas. Un abrazo FJ.

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