Arena, te vas lenta y suave,
Entre mis yemas rasposas,
Sin rencor ni sarna, suave,
Te vas sin darte a conocer.
De la agobiante playa,
De la desierta cima,
Eres del tiempo hermana.
Te vas, te vas Arena...
Caes rápida de mi mano,
Para volver al mundo.
Eras suya, ahora es tuya (alma).
No seré yo, suave Arena,
El que con agonía te retenga.
Te vas, Arena, Arena suave,
Te vas sin mí, te vas sin nadie.
(27 de marzo de 2008 - Primer poema a M.F.B.)
F.J.G.G.
cuanta ternura y a la vez cierto tono de melancolía entrecruzado se sienten en los versos
ResponderEliminarsin duda quien se va así sin poderla retener nos deja sensaciones encontradas
felicitaciones, besitos y luz
Hermoso plumaje de la palabra, elevando el vuelo a ras de agua. Gracias Francisco por vestir de jardín tu mirada.
ResponderEliminar